Camilo Villegas puso fin a una larga y emotiva sequía al conseguir birdies clave en la recta final del domingo para un 6-bajo 65 y ganar el Butterfield Bermuda Championship, su primera victoria desde que perdió a su hija de 22 meses de cáncer en 2020.
Villegas fue golpe por golpe con Alex Noren durante cinco horas hasta que todo lo que le quedaba era un embocar para par para su primer título de la PGA Tour desde 2014.
Se mantuvo erguido, levantando ligeramente el puño, y luego miró hacia el cielo antes de que los jugadores se apresuraran a entrar en el green para celebrarlo. Camilo Villegas cogió una botella de champán y bebió un trago.
Más que pasar nueve años sin ganar, Camilo Villegas y su mujer afrontaron la muerte de Mia, que falleció de cáncer cerebral en el verano de 2020. Villegas se perdió en el campo y terminó el año pasado en el número 654 del mundo.
Ahora tiene una exención de dos años y vuelve al Masters y al PGA Championship por primera vez desde 2015. Su mujer creó una fundación en nombre de Mia y su hijo, Mateo, nació en diciembre.
«Es difícil ponerlo en palabras ahora mismo», dijo Villegas. «Wow, qué viaje. Me encanta este deporte. Este juego me ha dado tantas cosas grandes, y en el proceso, te patea el trasero. La vida me ha dado tantas cosas grandes y, en el proceso, también te patea el trasero».
Volvió a mirar al cielo y dijo: «Tengo a mi pequeña ahí arriba mirando».
Villegas terminó con 24-bajo para ganar por dos golpes sobre Alex Noren, que nunca se recuperó de dos errores en la vuelta y cerró con 68.
Camilo Villegas, colombiano de 41 años, dividió su tiempo entre el Korn Ferry Tour y cualquier evento que pudiera conseguir en el PGA Tour, ninguno con mucho éxito. Siguió trabajando en su juego y luego vio cómo se unía en el momento adecuado.
Fue subcampeón la semana pasada en México. Fue ganador en Bermudas, su quinto título en el PGA Tour.
Alex Noren, que comenzó la ronda final con un golpe de ventaja, estuvo 48 hoyos consecutivos sin bogeys hasta que hizo bogeys consecutivos en los nueve segundos. El sueco pasó de una ventaja de un golpe a una desventaja de un golpe, y nunca le alcanzó.
Sintió un pequeño consuelo al ver que Villegas simplemente le superaba. Noren también pudo apreciar la alegría que sintió Villegas por la mano que la vida le ha repartido.
«Mi mujer es muy cercana a la suya y sé por lo que ha pasado, y es terrible lo que le ha ocurrido a él y a su familia, así que me alegro mucho por él», dijo Noren. «Yo tengo mis propios hijos y no me lo puedo imaginar. Así que estoy muy, muy feliz por él y por la forma en que jugó y la forma en que ha manejado su vida después. Es extraordinario».
Matti Schmid, tuvo que hacer dos birdies al final para un 67 para terminar en tercer lugar, lo que debería servirle para obtener una tarjeta del PGA Tour para el próximo año. Schmid se colocó en el puesto 120 de la FedExCup. Los primeros 125 después del evento final de la temporada la próxima semana obtienen tarjetas completas.
