Spieth embocó un chip para eagle e hizo un putt clave de par en el 17 para tomar su primer liderato de 18 hoyos en el PGA Tour desde el Sony Open en Hawaii en enero. No pasó el corte al día siguiente en Honolulu. Eso no sucederá en el TPC Southwind la competición de 70 jugadores no tiene corte.
El comienzo de los Playoffs de la FedExCup del PGA Tour ha sido accidentado. Las tormentas descargaron lluvia a primera hora de la mañana que causaron un retraso de algo más de dos horas. Los greenes estaban blandos pero rápidos. El TPC Southwind estaba empapado y embarrado.
No era el mejor día para llevar pantalones blancos.
Tom Kim, que sabe un poco de barro, probablemente debería haberlo sabido mejor. Decidió arremangarse los pantalones. Estuvo brevemente empatado con Spieth hasta que un bogey tardío le envió a un 64.
«No quería ensuciarme», dijo Kim. «Simplemente no me gusta. He tenido una muy mala semana una vez este año, así que estoy tratando de mantenerme alejado de ella, de verdad.»
Fue más bien un mal día en Oak Hill para el PGA Championship. Se metió en una zona pantanosa para buscar su golpe de salida, resbaló y salió con la camisa y los pantalones cubiertos de barro.
Collin Morikawa hizo seis birdies para un 65 y unirse a Emiliano Grillo a dos golpes. Morikawa ha donado 6.000 dólares a los esfuerzos de socorro por los incendios forestales de Hawai, y se ha comprometido a donar 1.000 dólares por birdie durante los Playoffs. Los abuelos de Morikawa nacieron en Lahaina y una vez tuvieron un restaurante en Front Street, que cerró hace muchos años.
Jon Rahm tenía los pantalones sucios y una tarjeta de puntuación a juego. El cabeza de serie número uno en la lucha por los 18 millones de dólares de bonificación de la FedExCup, iba bien hasta que envió su golpe de salida fuera de límites en el hoyo 16, par 5, y tuvo que salvar un bogey. Dos hoyos después, se fue al agua y estuvo a punto de caer de nuevo en su tercer golpe en el 18. Fue un doble bogey. Doble bogey.
Sus primeros nueve hoyos, Rahm empezó en el diez, no fueron mucho mejores con tres bogeys que le llevaron a un 73. Terminó con un bogey de tres putts.
Rahm jugó junto a los dos siguientes cabezas de serie, Scottie Scheffler y Rory McIlroy, cada uno con 67 golpes. Scheffler estaba 2 arriba al principio y respondió con seis birdies en sus últimos 12 hoyos.
«Es frustrante cuando ves que todo el mundo está haciendo birdies y tú estás 2 arriba en cuatro o cinco hoyos», dijo Scheffler. «Fue frustrante, pero aguanté muy bien y jugué muy buen golf después de eso».
McIlroy estaba decepcionado por no haber aprovechado sus buenos golpes desde el tee en un día en que los jugadores podían levantar, limpiar y reemplazar sus pelotas de golf desde la hierba segada a ras.
«No sé si puedo recordar una ronda en la que la haya pegado tan bien desde el tee, al menos en la memoria reciente», dijo McIlroy. «Hoy lo he hecho muy bien y me he dado muchas oportunidades desde la calle. Más o menos me voy del campo decepcionado con 3 bajo».
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Fotos: Jordan Spieth (PGA Tour)
