Carlota Ciganda cumple diez años desde su debut como profesional y su comienzo en el Ladies European Tour. Ana Peláez está a punto de cumplir un año desde su paso al profesionalismo y está dando sus primeros pasos en el LET. Separadas por ocho años, 32 años tiene la navarra, 24 la malagueña, ambas representan el presente y el futuro del golf femenino español. E incluso Ana Peláez ha señalado a Carlota Ciganda como uno de sus referentes en el mundo del golf.
El año del debut de la jugadora navarra como profesional fue el comienzo soñado de cualquier golfista: Dos victorias en el LET, ganadora de la Orden de Mérito y los títulos de “jugadora del año” y “rookie del año”. Carlota Ciganda llegaba al Ladies European Tour como un ciclón.
“No me esperaba ese año”, recuerda Carlota Ciganda. “No esperaba nada en concreto. Empiezas a jugar y no piensas en nada más. El primer año no tienes expectativas, por eso creo que es fácil que te vaya bien. En cambio, cuando llegan los resultados, aumentan las expectativas y empiezas a pensar más. El primer año iba a pasarlo bien, a disfrutar y me salió todo bien. No pensaba en nada, porque no tenía una historia en el circuito. No podía quedar ni mejor ni peor. En cambio, cuando tienes resultados, siempre quieres ir a mejor, porque si no, vas a peor. Te pones más presión y eso puede ser perjudicial”.
El inicio de Ana Peláez en el golf profesional tampoco ha sido usual. Sin la tarjeta del LET, la jugadora malagueña logró su acceso al circuito europeo femenino por las bravas, con una victoria en el Comunidad de Madrid Ladies Open, de modo que sólo le quedaría una más para igualar la cifra de la navarra en 2012.
“Este primer año ha sido un poco de aprendizaje, sobre todo al principio”, explica Ana Peláez. “Me costó mucho arrancar. Me puse mucha presión a mí misma, pero hablando con mi equipo pusimos solución a esos pensamientos, porque sabíamos que el juego estaba bien. Y cuando empezamos a fluir, a dejar que las cosas pasaran y a hacer bien el trabajo, llegó el triunfo en Madrid, y es verdad que me ha cambiado la vida. Desde entonces, seguimos por el mismo camino, centrándonos en la misma energía positiva. Me quedo con eso este primer año”.
En esta década, Carlota Ciganda ha logrado cinco victorias en el LET y dos en el LPGA, y ha participado en cinco Solheim Cup, formando parte del equipo ganador en tres ocasiones. Pero todavía le quedan muchos retos por delante.
“Me gustaría seguir ganando torneos, tanto en el LET como en el LPGA, estar arriba en la clasificación mundial, ganar algún grande y jugar la Solheim Cup el año que viene, que se disputa en España. Jugar este torneo en tu país sería muy especial. Todo eso me motiva y me gustaría conseguirlo”, concluye Carlota Ciganda.
En cuanto a Ana Peláez, en un año su salto cualitativo ha sido más que evidente. Y un claro ejemplo es que la jugadora andaluza ha pasado de acabar en el puesto 42 del Estrella Damm Ladies Open del año pasado a ser una de las jugadoras a tener en cuenta para la victoria en la edición de este año.
“Si me miro y me comparo con la jugadora que era en 2021, creo que ahora soy más madura en el campo. Por lo demás, creo que con el tiempo, todas las jugadoras vamos mejorando. Puedo tener un mal día, como todo el mundo, pero siento que la actitud, el trabajo y la forma de jugar, son diferentes”, terminó Ana Peláez.
Un animado y concurrido Pro-Am
Como suele ser habitual, este Estrella Damm Ladies Open presented by Catalunya ha vivido su prólogo con el tradicional Pro-Am, en el que han tomado parte un total de 36 equipos formados por una profesional y tres amateurs.
Entre ellos, además de los combinados de Carlota Ciganda y Ana Peláez, han suscitado especial interés entre los aficionados los equipos de la sueca Maja Stark, líder de la Race to Costa del Sol; la danesa Emily Kristine Pedersen; la sudafricana Lee-Anne Pace; y los capitaneados por las golfistas locales Camilla Hedberg, Elia Folch, Mireia Prat y Paz Marfá.
En el caso de esta última, también estuvo secundada por las jugadoras Sub 16 catalanas Alexandra Vidal, Ana Aguilar y Laia Llorente, quienes ganaron su plaza en el Pro-Am a través del programa “Esportcat Catalunya Challenge”, creado por la Secretaría General de l’Esport i de l’Activitat Física de la Generalitat de Catalunya.