Conners se puso en cabeza con un putt de más de siete metros para eagle en el hoyo 16 de par 5, su segundo eagle en ese hoyo en dos días, terminado su vuelta con 69 golpes, tres bajo el par de campo, y una ventaja de un golpe sobre el ex ganador en Bay Hill Martin Laird (67).
Rory McIlroy estaba a punto de unirse a Conners por la tarde hasta que en un par de golpes sueltos no encontraron la calle, lo que le llevó a hacer bogeys. Cerró con cinco pares consecutivos para un 71 que, según él, podría haber sido peor.
«Podría haber sido la ronda en la que podría haber tirado 74 o 75. Entré con 71 y bastante contento con eso», dijo McIlroy.
Quedó a dos golpes de distancia, junto con Viktor Hovland y Lanto Griffin, que hicieron 68 cada uno.
Jordan Spieth se mantuvo en la contienda de cara al fin de semana, lo que se está convirtiendo en una regularidad en el último mes, mientras intenta poner fin a más de tres años sin ganar. Spieth pegó un magnífico golpe de flop sobre el búnker a un green rápido que rodó a treinta centímetros del hoyo para escapar con el par y firmar un 69.
La previsión de lluvia para el sábado hace que el juego en Bay Hill sea más largo y difícil, pero también evita que los greenes se vuelvan tan duros como el año pasado, cuando Tyrrell Hatton ganó con un 74 de cierre.
«Veremos qué pasa y estaremos preparados para todo», dijo Conners.
Hatton al menos tiene una oportunidad el fin de semana. Abrió con un 77 y fue 10 golpes mejor el viernes, un 67 que le permitió pasar el corte con por un golpe.
También pasaron el corte los dos capitanes de la Ryder Cup: el irlandés Padraig Harrington, con un 74, y Steve Stricker, con un 71.
Conners, cuya única victoria en el PGA Tour fue hace dos años en el Valero Texas Open, salvó el par siete veces durante su ronda, la excepción fue en el hoyo 2 de par 3 cuando se quedó corto del green, a unos veinticinco metros, y terminó fallando su putt de par desde tres metros.
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Fotos: PGA Tour