A pesar de que Denny McCarthy empezó bastante mal en el AT&T Byron Nelson, con un doble bogey en el hoyo 4, todo lo demás para él fue coser y cantar. Se resarció de ese fallo enlazando cinco birdies consecutivos, entre el 6 y el 10, para después lograr otros tres (12, 13 y 14) y finalizar con dos más (16 y 17) al más puro estilo metralleta. Sin fallos, máximo acierto.
El Trinity Forest Golf Club de Dallas fue un escenario propicio para los birdies y las vueltas bajas, bastante más en la ronda de mañana que en la de tarde, donde la media de golpes subió algo más.
Tanto es así que a pesar de sus geniales números, no consiguió despegarse más que un golpe de los siguientes, Tyler Duncan y Tom Hoge, y dos de Matt Jones y Brooks Koepka, ambos encabezando un grupo numeroso de nueve jugadores, y siendo Koepka uno de los grandes candidatos a la victoria final por posición en el ranking.
Además de Koepka, figuran otros nombres de cierta relevancia en el torneo, como Daniel Berger (66 y T13), Rory Sabbatini, Henrik Stenson, Hideki Matsuyama, Pat Perez (67 y T22), Jordan Spieth (68 y T36), Ernie Els (69 y T55), Lucas Bjerregaard (70 y T81) y Thomas Pieters (70 y T81).
Respecto a la participación española, citar que en el torneo únicamente tenemos a Rafa Cabrera Bello. El canario ha comenzado en la zona media-baja de la tabla con 70 golpes y dos partes de juego totalmente opuestas, las luces y las sombras; si en los primeros nueve obtenía cuatro birdies que le lanzaban en la tabla, en los segundos se estancaba y aunque abría el 10 con otro birdie más, en la secuencia entre los hoyos 12 (tripateo incluido) y 17 se anotaba cuatro bogeys que frenaban en seco su progresión.
Aun así, aparentemente no debería tener problemas para pasar el corte tras la segunda jornada de hoy viernes. No se cree que se mejoren muchos los resultados y con un poco de temple, puede hacer tranquilamente 67 o 68 golpes y meterse ya en una parte algo más importante de la clasificación.
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Fotos: PGA Tour
