La jornada amaneció con un sol espléndido, el mismo que ha acompañado a las treinta jugadoras durante los tres días, pero el ambiente estaba más cargado que en las fechas previas. En el putting green en el que afilaban armas Luna Sobrón y Natalia Escuriola esta vez predominaba el silencio, síntoma de concentración y responsabilidad.
La mallorquina se sabía ante la oportunidad de ganar su primer Campeonato de España y, de paso, tomarse la revancha por la cantidad de veces –»¡han sido unas cuantas!», decía entre risas el jueves- que Natalia le había arrebatado la gloria en categorías inferiores; y para la castellonense era difícil abstraerse de una realidad irrefutable: en caso de victoria habría hecho lo que nunca nadie hizo antes, ganar cuatro Campeonatos de España. La tensión, pues, era lógica.
»¡Cómo es el golf Lo tenía todo bastante controlado hasta que ha llegado en hoyo 12, en el que se me ha complicado todo mucho. Era una salida al draw, y yo siempre prefiero pegar el drive al fade… pero no es excusa. A partir de ese momento me ha tocado luchar, viendo que además Natalia lo estaba haciendo muy bien, y que es una jugadora que cuando coge carrerilla puede hacer muchos birdies», comentaba la flamante ganadora.
Quiero dedicárselo a mi padre, especialmente, que estará sufriendo mucho, y a toda mi familia. Este triunfo me viene muy bien porque iba a acabar el año sin ganar un torneo, y no sé si lo necesitaba, pero sí que me va a dar mucha confianza de cara al futuro”.
Las ausencias de Azahara Muñoz, que sí acudirá la semana al Andalucía Costa del Sol Open de España Femenino, Carlota Ciganda o Beatriz Recari han sido compensada sobradamente por la actuación estelar de una Luna Sobrón que ha demostrado del primer al último hoyo que es una golfista LPGA. Juego y actitud le sobran para hacerse un hueco entre las mejores golfistas del planeta.
Cómoda jornada para Luna Sobrón… hasta el hoyo 12
En Pedreña ha ganado con -9 al total y dos golpes de ventaja sobre Escuriola, que ha sacado toda la garra que lleva dentro para hacer sufrir a su amiga y hoy rival hasta el último putt. Y eso que Sobrón manejaba una cómoda renta de seis golpes en el tee del 12. Fue ahí donde la vuelta se le empezó a complicar, y de qué manera.
Un 8 en la tarjeta de la mallorquina dejaba en cuatro golpes una ventaja que disminuiría de nuevo en el 14 con un nuevo birdie de la castellonense, que a partir de ese momento comenzó a tomar más riesgos, a buscar el trapo con descaro para intentar meter en apuros a una líder hasta ese momento imperturbable. Y la táctica funcionó en el hoyo 17.
En ese par 5, Natalia Escuriola se anotó un birdie que hubiese sido únicamente anecdótico si no fuese porque el putt corto para par de Luna Sobrón se quedó colgando del hoyo. Bogey y la distancia que se reducía a un solo golpe. Máxima tensión a falta del hoyo 18, un par 4.
Luna Sobrón jugó con maestría y temple el hoyo, tratando de dejarse una opción de birdie que le permitiese jugar para ganar hiciese lo que hiciese Natalia Escuriola. Y la golfista levantina, todo garra y pundonor, volvió a buscar la bandera, pero esta vez sin éxito. El par de Sobrón y el bogey de Escuriola sellaban la victoria de la primera, que se cobraba así cumplida venganza de sinsabores pasados.
Además del ‘match play’ mantenido por las dos jugadoras mencionadas, la jornada final ha dejado más cosas, como el 68 (-2) de María Beautell, mejor vuelta del día, o la tercera actuación consistente consecutiva de María Palacios, que ha sido tercera en solitario con el par del campo. Muy buenas sensaciones las de la golfista de Costa de Azahar.
La cuarta plaza ha sido para un trío formado por Patricia Sanz, Nuria Iturrios y Silvia Bañón, que al igual que muchas de sus compañeras enfilan ya el camino a Málaga para disputar el Andalucía Costa del Sol Open de España Femenino.
