Victoria, otra más, para Bryson DeChambeau. El científico del golf sigue demostrando que ha adquirido su plena madurez golfística y que ahora sí, es una de las principales figuras del panorama mundial. Ya es candidato a todo si su golf sigue por esta línea. Y apunta a que sí.
Lleva cinco triunfos en tres temporadas y ahora se ha puesto como número cinco del mundo, adelantando a todo un ex nº1 como Rory McIlroy.
La última ronda la terminó con 66 golpes (cuatro birdies, bogey y un eagle que puso en pie a todo el campo en el 16), completando las cuatro vueltas con 66 golpes o menos, una regularidad asombrosa que, no obstante, y dadas las facilidades del campo, solo le dieron un impacto de ventaja al final, que fue lo que le separó de Patrick Cantlay (65).
Más abajo, Sam Ryder apretó mucho con 62 golpes, con nueve birdies y sin errores, y empezando y terminando con acierto su vuelta; también se dejó ver, y mucho, Rickie Fowler (63), con un parcial de cuatro birdies seguidos entre el 10 y el 13, a los que sumó otros cuatro más.
De los nombres destacados, hay que decir que Joaquin Niemann mejoró con 66 golpes y subió hasta el puesto 10, igual que Gary Woodland (63). Tony Finau no hizo su mejor torneo y se tuvo que conformar con un puesto 36 empatado con 68 golpes; Graeme McDowell terminaba con 70 en el puesto 41 y Jordan Spieth, muy desdibujado, se quedaba en el puesto 55 con 72 golpes en su última ronda.
Consulta aquí la clasificación
Fotos: PGA Tour