Una espectadora amante de este deporte, Corine Remande, recibió un golpe en su ojo derecho durante la primera jornada de la Ryder Cup en París de una bola golpeada por Brooks Koepka. Aunque fue rápidamente atendida por los servicios médicos, ahora hemos sabido que Corine ha perdido por completo la visibilidad de su ojo.
La aficionada ha anunciado, por su parte, que tiene pensado demandar a los organizadores por considerarles culpables del hecho al no haber avisado a los seguidores del posible peligro de la zona donde se encontraban. Además, hay que tener en cuenta que Remande es natural de Egipto y por ello la propia Ryder se ha ofrecido a ayudar a la mujer tanto con los costes médicos como con la repatriación para poder volver a su país.
Según recoge la agencia France Press, Remande confirmó la triste noticia: «Los doctores me han dicho que he perdido la visión de ese ojo. Todo ocurrió muy rápido. No sentí ningún dolor cuando me golpeó. No sentí que la bola me había golpeado el ojo y después sentí que la sangre empezaba a derramarse. El escáner que me hicieron el viernes confirmó la fractura en el ojo derecho y una explosión en el globo ocular».
El propio Brooks Koepka no ha querido tardar en salir a la palestra con un comunicado oficial que reza lo siguiente: «Me siento profundamente herido y triste por el trágico accidente que ocurrió cuando un bola golpeó a la señora Remande. Hablé con ella en el momento en el propio campo de golf y ahora me he enterado de que su estado es peor de lo que se pensaba inicialmente. He contactado con ella y con su familia para ofrecerles mi más sincera solidaridad de corazón. Estoy desconsolado por el incidente. Mis pensamientos están con la señora Remande y su familia y les he pedido que me mantengan informados sobre su estado».