El R&A cita como ”ejemplo de gestión eficaz y responsable en el uso del agua” al Centro Nacional de Golf, que en 2016 acometió una mejora importante en su sistema de riego que permite no solo ahorrar agua, sino regar el campo de una manera mucho más eficiente y con ello mejorar el mantenimiento del campo.
El R&A creó en 2004 este Departamento de Sostenibilidad, que colabora con organizaciones de golfistas profesionales y amateurs de más de 110 países, siempre con el objetivo de apoyar y orientar
a los campos de golf a desarrollar una relación positiva con el medio ambiente.
USAR EL AGUA DE MANERA EFICIENTE
El agua es un recurso preciado, y los campos de golf solo deben usar lo estrictamente necesario. Como bien es sabido, la disponibilidad de agua de calidad es un problema importante a nivel mundial. Muchos campos de golf abusan del uso del agua y esto, con frecuencia, produce ciertas críticas. En 2004, World Wildlife Fund (WWF) estimó en entre 10.000 y 15.000 los metros cúbicos de agua dulce por hectárea la cantidad que se bombeaba para poder mantener los campos de golf verdes en el sureste de España. Esto corresponde al agua suficiente para abastecer una población de 12.000 habitantes.
El Centro Nacional de Golf, gracias al cambio de diseño en las zonas regadas y a su interés por regar más eficientemente, ha conseguido reducir esta cantidad hasta los 6.000 metros cúbicos por hectárea y año.
La mayoría de los campos de golf están teniendo restricciones de uso de agua para el riego. Esto obliga a hacer un uso y gestión responsable. Regar en abundancia supone un coste económico muy alto y conduce a la obtención de superficies blandas que reducen el rendimiento del juego, a no ser que se invierta en solucionar y manejar dicho exceso.
El uso del agua en cada campo está en el punto de mira de cada Comunidad, debido al mayor valor que se le da. El aumento de los costes del agua por parte de las administraciones se produce tanto por el almacenamiento y distribución como por las primas asignadas a este recurso. Es posible que los clubes de golf no puedan permitirse comprar tanta agua en el futuro, por lo que deben buscar suministros alternativos, más baratos, y formas de reducir las cantidades de agua que se usan.
Para asegurarse de que se está haciendo un consumo responsable del agua, hay una serie de medidas que se pueden realizar:
-Adoptar la filosofía de un césped más seco, firme y saludable.
-Priorizar áreas de riego, como greenes, calles y tees.
-Regar por la noche cuando la evapotranspiración es baja.
-Tener una tecnología moderna de riego para asegurar una aplicación eficiente y efectiva del agua.
-Incorporar riego manual en el programa de riego.
-Utilizar programas de aireación y agente humectante para garantizar que el agua aplicada realmente penetre en el suelo.
-Enseñar a la plantilla el uso eficiente y efectivo del agua.
-Monitorizar regularmente los perfiles del suelo a las zonas regadas con un medidor de humedad para asegurar que se logre un riego efectivo.
-Reciclar el agua utilizada para lavar la maquinaria.
-Ser diligente al cooperar con las autoridades locales y las agencias ambientales para cumplir con cualquier restricción que se imponga.
-Conocer y cumplir con la legislación vigente.
-Proporcionar cifras de consumo de agua para consumo público y poder demostrar un enfoque responsable y transparente en los procedimientos.
