A tan sólo 7 kilómetros de la ciudad de Figueras se encuentra este paraíso en plena naturaleza del Empordá. Todo un reto que sin duda supuso a nivel deportivo uno de los grandes desafíos del calendario para los profesionales catalanes.
La mañana se inició con bajas temperaturas que fueron templándose a medida que avanzó la jornada. La ausencia de viento y el cielo despejado brindó el escenario perfecto para practicar el golf. Las buenas condiciones no garantizaron unos resultados bajos ya que las exigencias técnicas del recorrido, unidas a las complicadas posiciones de bandera con las que el campo recibió a los jugadores, dotaron a la competición de una dificultad añadida.
Una vez más, Olagolf acompañó a los jugadores aportando a la competición la seriedad y rigurosidad que siempre demuestra. Este binomio entre la CPGA y Olagolf se consolida torneo tras torneo. Una misma manera de concebir el golf como deporte de alta competición es la base del entendimiento.
En lo relativo a los resultados el ganador en Torremirona fue Jordi García Pinto con un resultado de -4, le siguieron con -2 Pol Bech y Xavi Puig. La mejor en Damas fue Gemma Fuster, jugadora que se une a García Pinto, Bech y Puig formando el cuarteto que logró vencer al campo.
El ranking tras Torremirona continua liderado por un incombustible Pol Bech, Xavi Puig es segundo, seguido muy de cerca de Victor Bertrán.