Tercera ronda del St. Jude Classic y el canario sacó su varita de la chistera. Vuelta de gran aplomo (65 golpes) en la que se marcó siete birdies y dos bogeys para, como un cohete, recortar los 17 puestos que le separaban del lugar más alto de la tabla.
No está solo, pues tiene compartiendo posición a Ben Crane y Stewart Cink, pero por ranking y golf debería ser capaz de superarles al final del domingo.
Apretará y mucho Ben Crane, quien lleva 31 hoyos seguidos sin un bogey, por lo que no será un rival asequible, pero si Rafa vuelve a ofrecer una exhibición como la del sábado (a pesar del viento y las malas condiciones), tendrá el título en sus manos.
El putter ha vuelto a ser su factor determinante, si bien approchando también ha estado magnífico y pocos o ningún pero hay que ponerle a su vuelta, jugada además junto al talento de Phil Mickelson.
Eso sí, cualquier actor se puede sumar en este último día ala pelea por el título, pues todo está muy apretado y nombres como Kevin Chappell (-7), Daniel Berger (-6), el propio Phil Mickelson (-5) o Adam Scott (-4) aun tendrán algo que decir.
Quien se ha tenido que volver a casa ha sido Gonzalo Fernández Castaño, incapaz de superar el segundo corte del torneo tras entregar 73 golpes.
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Fotos: PGA Tour