Sebastián García Rodríguez está viviendo sus horas más dulces, un romance con el golf que comenzó hace algunas semanas ganando el Alps de las Castillas en Cabanillas, la prueba del Circuito de Madrid disputada en La Rejas, un torneo invitational y tiene mucha papeletas para alzarse con el triunfo en el Gran Premio Meliá Hacienda del Conde, que se está disputando en Buenavista Golf, en Tenerife.
El madrileño firmó hoy jueves su segunda vuelta consecutiva de 65 golpes, -14 total en su marcador, pese a que las condiciones no eran nada fáciles ya que el viento se fue levantando a medida que avanzaba la mañana. Pero hasta el viento se pudo del lado del madrileño, para poner distancia en el marcados con esos seis golpes de distancia que le separan de Alfredo García Heredia (-8).
«Pido para mañana más viento, si es posible, que ya le tengo pillado el truco. Y me he encontrado cómodo con él. Además de jugar bien, de colocar la bola dónde quería, he ido muy bien de cabeza, porque analizando mi golf años atrás no hay mucha diferencia en el juego pero sí en la cabeza y en la actitud», explica en líder, que pasó 6 años muy malos en el Challenge, entre las lesiones y lo malos resultados.
«Este Circuito Gambito es perfecto para los jugadores que queremos progresar. Es lo que España necesitaba: seis o siete torneos al año, una continuidad para mantener el nivel competitivo. Además, en cada prueba ves que el nivel de los jugadores es muy alto y seguro que de aquí van a nacer grandes estrellas», comenta Sebastián García Rodríguez, que hoy tuvo un comienzo fulgurante con tres birdies y dos eagles en los cinco primeros hoyos (comenzaba por el 10). 30 golpes, el mejor parcial del día en los nueve segundos hoyos.
«Mi objetivo es jugar todas la pruebas nacionales que pueda e intentar conseguir ese año la tarjeta del Tour de Europeo a través de la Escuela», añadió.
La segundo posición en solitario es para Alfredo García Heredia, subcampeón de España del Campeonato de la PGA en Santa Marina el año pasado. El asturiano también ha hecho dos vueltas gemelas de 68 golpes (-8 en total) y espera ganar su primer torneo del Circuito Gambito, que disputa la segunda prueba de la temporada 2017.
Steve Surrey es tercero con -6 y con uno menos Carlos García Simarro (-5). Claro color español en la clasificación de cara a la última jornada que se disputará en formato de Pro-Am, una de las grandes novedades de este Circuito Gambito que tanto ha encantado a los profesionales.
El corte ha quedado establecido en +5, y han pasado 47 profesionales. Entre ellos José Luis Adarraga (-1, puesto17º) vigente ganador del Orden de Mérito del Circuito Nacional que estableció Gambito la pasada temporada. Gabriel Cañizares, hijo mayor del veterano jugador, José María, miembro de la Ryder Cup. Séptima posición para Manuel Ballesteros (-3) sobrino del Maestro Seve; aunque no pasó su hijo Javier que se quedó a las puertas por un golpe. Tampoco pasó Miguel Ángel Jiménez Bravo, el hijo mayor del veterano jugador malagueño, triunfador en el Champions Tour.
Mañana viernes será la ronda definitiva en formato Pro-Am y será la gran fiesta del golf amateur, que podrán compartir partido con sus héroes.
«He hecho un campo divertido», Seve
Al igual que el escultor italiano Miguel Ángel, que golpeó en la rodilla a su ‘Moisés’ para que hablara, cuando Seve Ballesteros terminó de diseñar Buenavista Golf, su única creación en la Islas, no hizo falta decir nada: las vistas espectaculares hablaban por sí solas. «He hecho un campo divertido», fue la frase que rubricó el Maestro de Pedreña en este paraíso perdido de Tenerife.
Esta semana, su pequeña criatura metida aún en la adolescencia (14 años hace que Seve lo inauguró en 2003) le rinde un homenaje con esta Gran Semana del Golf. Y qué mejor tributo que el de su hijo Javier, que jugó este campo el martes por primera vez y que firmaba el libro de honor, allí donde su padre lo hiciera por primera vez. «A mis amigos de Buenavista, que tienen un campo y un lugar espectacular para jugar al golf».
Muy emotivo fue también fotografiarse en el ‘Rincón de Seve’, un mini museo que le ha dedicado el club a Severiano, donde se exhiben sus manos e innumerables fotos del desaparecido golfista. O caminar por el Paseo que lleva su nombre.