El campo no recibió a los jugadores con su mejor cara y el viento quería volver a ser protagonista en esta Copa del Mundo, pero dos jugadores, Thorbjorn Olesen y Soren Kjeldsen, iban a otra cosa, jugaron su partido, volaron sobre los hoyos y les salió todo redondo, de 10, matrícula de honor con un 60 en su estadística que les ha puesto como sólidos e indiscutibles líderes.
Record del día y, por supuesto, de la historia de esta competición que, pase lo que pase, se ha anotado sus nombres para los anales. Haciendo del viento su más ferviente súbdito, los dos daneses ejercieron de martillo pilón con dos eagles y ocho birdies, cinco de ellos consecutivos (del 10 al 14), para llegar desde el séptimo puesto al primero.
Por detrás de ellos, entre el ‘resto de los mortales’, todo está muy igualado. China con Haotong Li y Ashun Wu sigue muy solvente tras una ronda de 65 golpes y, tras ellos, España, quien ha aguantado en el podio merced al 67 entregado (seis birdies y un bogey).
Supieron hacerse fuertes Rafa Cabrera Bello y Jon Rahm en los fourballs, mejorando incluso su tarjeta de la ronda previa y cediendo la segunda posición por un solo impacto. De nuevo firmes con el juego largo y no tanto con el corto, por lo que podrían haber conseguido incluso un registro más bajo, pero aun así, sus sensaciones siguen siendo extraordinarias.
Fuera del podio continúa Italia (Manassero y F. Molinari), empatada con Inglaterra (ambos con rondas de 66 golpes), Estados Unidos y Francia (estos dos con 67 impactos).
Pasado el ecuador de la competición, todo está muy abierto e igualado, salvo por la ventaja que han cobrado los daneses que, no obstante les será difícil mantener salvo que tengan otro día inspirados por las musas.
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Fotos: World Cup of Golf
