Ya dijimos tras la jornada del sábado que Rickie Fowler dependía casi en excluisva de sí mismo para ganar y no quedarse sin Ryder, pues bien, tras la machada protagonizada la jornada previa, donde acumuló la friolera de 45 hoyos sin bogeys, el domingo vivió su particular via crucis por Bethpage, donde se fue hasta los 74 golpes (dos birdies, tres bogeys y un doble bogey).
En el lado totalmente opuesto estaba Patrick Reed, solvente con sus 70 impactos y vencedor por la mínima ante el resurgir de su compatriota Sean O’Hair (66 golpes), segundo a un único impacto y empatado con Emiliano Grillo.
Bien le fueron las cosas a Jason Day con 69, cuarto a la postre y el mejor de los primeros del ranking empatado con Adam Scott, Jordan Spieth se quedó en el top 10 también con 69, Bubba Watson subía hasta el 13 (66), Dustin Johnson finalizaba en el puesto 18 con -2 y Rory McIlroy volvía a caer, con 73 golpes, hasta la posición 31, desconocido en juego y sensaciones.
Así las cosas, Fowler puede despedirse, en principio y salvo sorpresa netamente mayúscula, de la Ryder, no así Reed, quien se asegura estar en la cita y además afianza su posición de liderato en el ranking de la FedEx Cup.
Por contra, quienes no podrán acceder a la siguiente ronda de eliminatorias serán, entre otros, Keegan Bradley, Jonas Blixt o Francesco Molinari, por haber quedado por debajo del puesto 101, al tiempo que de cara a la próxima deberán apretar otros como J.B. Holmes o Matt Kuchar.