Las tormentas no han dejado que luzca el sol en Oakmont, cubriendo el cielo y provocando que se suspendiera la jornada inicial del US Open.
Si bien los primeros que saltaron al campo aprovecharon las condiciones, poco a poco el cielo se fue nublando y las vueltas subiendo de registro, incluidas las de los españoles, quienes se iban al +4 (Rafa Cabrera-Bello) y al +6 (Jon Rahm), demasiado para un comienzo en esta prueba, aunque obviamente se espera que mejoren con el paso de los hoyos.
Por su parte, quien navegaba con fluidez bajo el agua era Andrew Landry, un jugador nada habitual por las partes altas de la clasificación pero que se encontró muy a gusto desde el primer golpe.
En segunda posición están, de momento, Bubba Watson y Danny Lee, mientras que para encontrar a los favoritos como Jordan Spieth, Rory McIlroy o Jason Day hay que bajar mucho más, pero es normal debido a la suspensión.
Queda aun todo el torneo, estamos en los primeros compases así que no hay nada decidido y el US Open no ha hecho más que ofrecer sus primeros detalles.