Cuatro birdies y tres bogeys le han supuesto un 71 a Andrew Loupe con el que sus rivales, en concreto Roberto Castro, le pisan ya los talones al frente del Wells Fargo Championship, prueba del PGA Tour.
El norteamericano, tras su 65 del primer día, se iba muy largo, y en consecuencia, su tarjeta lo pagaba; por contra, sus errores se convirtieorn en aciertos para Roberto Castro, su compatriota, quien mejoraba prestaciones con 66 impactos, mejor tarjeta del día con un eagle, siete birdies y tres bogeys, para colocarse segundo al ascender 28 posiciones.
Justo por detrás de él, un grupo de grandes perseguidores, con Chesson Hadley (un gran 67 para subir también muchos puestos), Mark Hubbard y Steve Wheatcroft, todos norteamericnaos, como los diez primeros.
Ascendiendo también llegan Phil Mickelson, muy regular con vueltas de 69 y 70 golpes, y dos nombres propios que prácticamente se calraon la vuelta: Rickie Fowler, 68 golpes con cinco birdies y un bogey, y Rory McIlroy, con 69, quien se ha recuperado de su mal inicio gracias a un eagle, cinco birdies y cuatro bogeys.
Precisamente Fowler, a pesar de la presión que puede llegar a suponer jugar con el norirlandés, decalaraba que «Rory y yo siempre disfrutamos cuando jugamos juntos. Hoy ha sido muy divertido ver cómo nos marcábamos, aunque desafortunadamente, hizo un bogey al final, pero va a ser un fin de semana divertido», a lo que McIlroy le respondía: «Hablamos durante todo el camino, ya que cada vez que puedes jugar con gente así, te hace sentir un poco más cómodo y hace que parezca que estás jugando con tus amigos en casa».
De momento hay buena química, veremos si ocurre igual si se juegan el título en la última jornada.