Con el sorprendente irlandés Paul Dunne fuera de la lucha por el triunfo en los hoyos finales, la pelea se centró en los pesos pesados que navegaban por la parte alta de la clasificación: Louis Oosthuizen, Jason Day, Zach Johnson, Jordan Spieth, en busca del ‘Grand Slam’ y el número 1 del Ranking Mundial, Sergio García y compañía.
Con su quinto birdie del día, el del hoyo 10, Sergio García se situaba en una posición idílica. O todo lo idílica que puede ser en la lucha por el triunfo en un torneo grande con los mejores golfistas del mundo. El castellonense era cuarto con -14, a solo un golpe de un Zach Johnson que mostraba su primera y casi única flaqueza, primer bogey del día en el 13 tras siete birdies,, Marc Leishman y Adam Scott. Por detrás, Jordan Spieth quedaba momentáneamente KO tras un doble bogey en el 8.
El primer gran contratiempo para Sergio llegó en el 12. Después de salvar un par complicadísimo en el 11, el castellonense no pudo repetir la maniobra, firmando un bogey que le alejaba de la cabeza. Dos golpes que descontar y seis hoyos por delante.
Great bunker shot from Sergio on 11. Still 2 off the lead. Live blog: http://t.co/KMlwUwHb10 #TheOpen https://t.co/Qg065dtWnD
— The Open (@TheOpen) julio 20, 2015
A partir de ahí todo fueron malas noticias: bogeys en el 13 y en el 17 y la sensación de que no iba a entrar un birdie más. Así fue, y el castellonense se despidió de una buena opción de ganar un ‘major’ en la catedral del golf. Pese a ello, esta sexta plaza es un magnífico resultado. Nuevamente ha sido competitivo en una cita de máxima exigencia, y eso es un dato a tener en consideración.
Con -15 concluyeron el día Louis Oosthuizen, Zach Johnson y Marc Leishman, que salieron a play off de cuatro hoyos. Los dos birdies del norteamericano en los dos primeros fueron suficiente para firmar un triunfo merecido y tremendamente peleado.
El otro español que pasó corte, el canario Rafael Cabrera-Bello (T40), concluyó con un más que buen 71 (-1) para -5 al total. Sus vueltas de 71, 73, 68 y 71 reflejan la consistencia del insular, que atraviesa un óptimo momento de forma.