El domingo aguantó a pie firme el ataque de Dredge con un sólido 68(-3) para un total de nueve bajo par y una victoria por dos golpes.
Es su tercer título del Circuito Europeo, el primero desde el Johnnie Walker de 2007.
Con esta victoria el escocés se saca varias espinas, la más dolorosa la de 2012 cuando lideraba por tres su abierto nacional a falta de cuatro hoyos y lo dejó escapar ante la desolada galería de casa. Al año siguiente se llevó un disgusto parecido en el Open de España en El Saler y perdió el desempate del BMW PGA.
«Pensé que nunca llegaría», declaró, «estos últimos años he tenido buenas oportunidades de ganar pero no las he podido aprovechar, unas veces por errores míos y otras porque alguien lo ha hecho mucho mejor que yo.».
Este año llegó a Dinamarca bien preparado para ganar después de quedar tercero en el Open de Escocia y decimoquinto en el Campeonato de la PGA la semana pasada
«Este verano me encuentro más confiado que nunca. Hoy le he pegado de maravilla y me ponía al golpe convencido de que saldría bien.»
Como muchos de los participantes, Warren se ha quedado impresionado por el entusiasmo de la afición danesa. Más de 80.000 espectadores han seguido el torneo esta semana. El domingo aguantaron impertérritos más de una hora de de retraso por culpa de la lluvia hasta que salió el partido estelar.
«El público ha estado extraordinario y ha sido fantástico jugar para ellos. El ambiente me ha recordado mucho al de la PGA la semana pasada, sobre todo en los cuatro últimos hoyos.»
Warren empezó el domingo con tres birdies en los 8 primeros y Dredge se fue quedando atrás, pero el galés reaccionó con tres birdies en cuatro hoyos a partir del 11 y se puso a dos golpes del líder.
Esta vez Warren aguantó bien el tirón. El momento decisivo fue un pat desde el borde de green en el 14 para igualar el birdie de su perseguidor. Llegó al 18 con tres golpes de ventaja y se pudo permitir el lujo de hacer tres pats para ganar por dos
El favorito del público Thomas Björn dio espectáculo y entregó un 69 para quedar cuarto empatado.
