Un triple empate entrando en el tramo conocido como “The Snake Pit”, definió el resultado del torneo. Senden trató de mantenerse enfocado, tal como había logrado durante todo el domingo, el resultado será difícil de olvidar para él.
Senden firmó un birdie de más de veinte metros en el hoyo 16, uno de los dos birdies que se consiguieron en este hoyo, el más complicado del recorrido, en la ronda final. Siguió con otro de seis metros para construir una ventaja de dos golpes, después hizo lo mas difícil para impedir que Kevin Na pudiera alcanzarle dejó un putt dado en el 18 desde doce metros para par.
70 golpes, uno bajo el par, suficiente para levantar un trofeo que se hizo muy pesado para el ganador.
“No he mirado mi teléfono, pero seguro que tengo más de cuatro mil mensajes”, comento el feliz ganador. “Uno se siente bien después de conseguirlo siete años después. Muchas cosas buenas por venir”
Una de ellas el Masters de Augusta el mes que viene.
A sus 42 años de edad, este australiano ha pasado a ser décimo tercero de la FedEx Cup y su única esperanza de volver a Georgia por tercer año consecutivo era la victoria. Eso no parecía muy posible tras los 71 y 72 golpes con los que inició el campeonato, que le colocaron en medio del paquete. Los 64 golpes del sábado volvieron a colocarle dentro de la contienda. Remató en una ronda final salvaje y ventosa en Copperhead tal como ha sido durante toda la semana.
Na por su parte se recupero de unos primeros nueve hoyos atroces, incluyendo un doble bogey fallando un putt de menos de un metro. Estuvo apunto de enviar su bola al agua en el 16 y salvo el hoyo con un par. Embocó un putt de cuatro metros y medio para birdie en el 17 para colocarse a un golpe de la cabeza. Sin embargo el pitching – wedge desde el primer corte de rough en el 18 se fue largo, a doce metros del hoyo, un putt para birdie y formar un desempate que nunca llegó. 72 golpes uno detrás de Senden.