Cañizares ganó en la que era su tercera aparición como miembro del Tour, en el Russian Open , pero ahora tras doscientos eventos sólo puede presumir de aquella victoria.
A sus 31 años, ya ha conseguido dos “top ten” esta temporada y admite que ha adquirido confianza después de su gran actuación en el Turkish Airlines Open, donde jugó con el número uno del mundo en el penúltimo partido del domingo.
“Gracias por recordármelo” , bromeo cuando se le recuerda sobre el tiempo transcurrido desde su última victoria.
“Me siento muy bien, mi juego está definitivamente aquí, solo debo recuperar la rutina de nuevo. Sin pensar demasiado en las cosas y dejar que sucedan. Con suerte voy a seguir jugando bien y disfrutar del fin de semana”.
Cañizares tiene una ventaja de un golpe sobre el inglés Seve Benson, quien debe su nombre al mito cantabro, ambos firmaron 68 golpes en la segunda ronda.
Rafa Cabrera-Bello es tercero, con un total de nueve bajo par, aunque el canario comenzó como un tiro, 30 golpes en los nueve primeros hoyos, bogeys en el quinto y séptimo, comenzó por el hoyo 10, frenaron su carga.