Golfconfidencial. El líder salió algo nervioso, y en el 4 Justin Rose ya le había alcanzado. Pero luego se volvió a centrar con dos birdies cruciales en el 6 y en el 7 y volvió a recuperar su ventaja inicial.
Y cuando se puso tres por delante con un birdie de siete metros y medio en el 10, ya no hubo quien parara al jugador más sólido del golf actual, solo comparable en consistencia al norteamericano Jason Dufner en este momento.
Haciendo un despliegue de confianza y golpes de calidad, entregó su tercer 68 de la semana, para un total de 15 bajo par y una victoria por cuatro golpes sobre Rose y el antiguo campeón del Abierto Británico, Paul Lawrie.
El año pasado tuvo que desempatar con Westwood por el primer puesto del mundo, en cambio este año no se ha visto amenazado en ningún momento.
Donald y McIlroy se han turnado ya seis veces en cabeza del ranking mundial y volverán a enfrentarse el el Memorial Tournament el jueves que viene, aunque ahora el verdadero objetivo de Donald es el Open USA que empieza el 14 de junio en San Francisco.
Es la primera vez que Donald consigue defender un titulo. «He elegido el mejor momento para hacerlo, en el torneo más importante del Circuito Europeo y para volver a ponerme primero del mundo», declaró, «no se puede pedir más. El año pasado la llegada al 18 fue muy apretada, nos lo íbamos jugando todo. En cambio este año he podido disfrutar del paseo con cuatro golpes de ventaja, sobre todo después de ponerme en green. Es un gran orgullo para mí segir siendo el número uno un año después.
«Pero ha sido un día muy tenso , el campo estaba complicado. En este campo hay muchos golpes de presión y hay que pegarle sólido en el momento oportuno… Sabía que le estaba pegando bien, y solo tenía que confiar en mi swing. He pegado muchos golpes muy sólidos y he pateado bien.
«He empezado flojo, pero nunca me puse por detrás, y después del 4 no le he dado a Justin casi ninguna oportunidad.
«Esto es el resultado de mucho trabajo, no solo mío sino deI gran equipo que me rodea, y es una gran alegría porque significa que estamos haciendo las cosas bien.»
En cuanto a sus objetivos, Donald lo tiene claro: «Ganar Grandes. Siento que me voy acercando, y cada vez que gano la confianza sube.»
Rose entregó una vuelta de 69 y habría quedado segundo en solitario si no llega a fallar un pat de metro y medio en el 18. «Hoy la diferencia la ha hecho el pat de Luke. Metió varios pats cruciales a media vuelta y no ha fallado ni un golpe al final.»
Por su parte Paul Lawrie firmó un 66, la mejor vuelta del día, para alcanzar a Rose. Al terminar comentó: «Nadie puede quejarse de hacer 66, pero yo sé que me he dejado algunos golpes por el campo».
El escocés de 43 años, que era el 272 del mundo hace catorce meses, ahora podría meterse entre los 30 primeros. En este momento es el mejor jugador de Escocia, va segundo en la lista de puntos de la Ryder y está decidido a volver al equipo después de 13 años.
«Cuando tienes una buena racha la confianza sube», afirmó, «y nunca me he sentido tan confiado como ahora»
Y entre los españoles, el mejor clasificado es Álvaro Quirós, que entrega hoy una vuelta de 70, con cuatro birdies y dos bogeys, y se mete empatado entre los 10 primeros con -4.
Un golpe por detrás, Rafael Cabrera-Bello (-3) queda 15º empatado.
José María Olazábal entrega otro 70, con cinco birdies y tres bogeys, y termina al par en el torneo.
