Patrocinadores, TV y Solheim Cup

Golfconfidencial. Como es lógico, defendí la idoneidad de este sector, lo mejor que supe y pude., aunque no debió ser muy convincente, a tenor de su siguiente cuestión:

–       Bien, pero el crecimiento del golf se ha estancado en los últimos tiempos ¿No crees?

Ante semejante aseveración poco podía hacer. Tan sólo darle la razón.

Este responsable de patrocinios se estaba planteando, seriamente, retirar su inversión en el golf español. Supongo que será la tendencia general en estos momentos. El golf tuvo su auge hace algunos años, pero de un tiempo a esta parte, el ritmo de crecimiento está estacando, cuando no, en franco retroceso.

Dos noticias, estos días, me ha llamado la atención. Por un lado, un movimiento que pretende hacer de Madrid la sede de la Solheim Cup 2015. Por otro, los casi quinientos mil clientes que tiene el Golf Channel francés. Ambas noticias, aunque parezcan ajenas entre si, tienen  en común, junto con las primeras líneas de esta reflexión, más de lo que parece.

Subirse a la ola que representa conseguir la Solheim Cup para Madrid sería lo sencillo. Ahora bien, ¿realmente necesita el golf español este evento bienal en el que las mejores jugadoras de Europa se enfrentan a las estadounidenses, a semejanza de la Ryder Cup? Sinceramente, no creo que ayude en nuestro país al crecimiento del deporte y el negocio del golf.

Recientemente, hemos tenido al número uno del mundo Luke Donald en El Encín y pasó con más pena que gloria entre los medios de comunicación generalistas, y tampoco se puede decir que el seguimiento de los aficionados in situ fuera excepcional.

 La Solheim Cup representa en las ciudades donde se celebra un evento que mueve a cientos de miles de aficionados y los grandes medios llenan páginas y páginas. Recuerdo, hace años, llegar a un aeropuerto europeo y ver un cartel inmenso de la Solheim Cup que debía celebrarse al año siguiente. Impensable en nuestros aeropuertos.

Difícil que los comités encargados otorguen su confianza a Madrid si no existe la inversión necesaria. Inversión, que debe llegar desde el sector privado pero, desgraciadamente, éste ya no cree en el golf.

Nos preguntamos hace un año la razón de que la Ryder de 2018 se fuera a París, en lugar de venir a Madrid. Ahora, les puedo dar cerca de quinientas mil razones. Los clientes que Golf Channel está a punto de alcanzar en el país vecino. No es cuestión de comparar. Con esa base es sencillo para cualquier patrocinador apostar por el golf.

El camino en España debería ser el conseguir una base sólida de aficionados y después, apostar por los grandes eventos.

No quisiera despedir estas líneas, sin tener un recuerdo para Macarena Tey, que nos dejó esta semana. Una gran dama del golf, que formó a muchas de las jugadoras españolas que hoy triunfan por el mundo. Descanse en paz.

Hasta la próxima