Pues bien los nuestros han demostrado, especialmente en estos dos últimos meses de curso, que se debe seguir confiando en ellos y que a poco que las cosas se conjuguen bien, 2012 va a ser un año excepcional. Cerramos el año con un balance más que positivo ya que se han conseguido 7 victorias, tenemos a 3 jugadores, que podrían ser 4 si efectivamente las milésimas de punto le son favorables a Gonzalo Fernández Castaño a 31 de diciembre, entre los 50 primeros del mundo, tenemos a 5 metidos entre los 100 primeros del mundo, nuestra presencia en los Grandes el año que viene puede ser histórica y como guinda del pastel tenemos ahora mismo a 4 jugadores en las listas de la Ryder con serias opciones de poder enfrentarse a los norteamericanos conducidos por José María Olazábal.
Creo que todos estos datos, más algunos como por ejemplo los 6 que estuvieron en Dubai en la gran final del circuito, lo alcanzado por Jorge Campillo en el Challenge y esas 13 o 14 tarjetas que se tendrán para 2012 es un balance más que favorable para un país que apenas llega a los 2000 profesionales de golf. Es verdad que uno todavía más pequeño, irlanda del Norte, ha cosechado 2 Grandes este año, más numerosas victorias, pero no comparemos la tradición de unos y de otros.
Aquí es verdad que se siguen haciendo las cosas un poco al son que marca la inspiración de nuestros campeones, por ejemplo, nos gustaría saber como se está trabajando de cara a los Juegos Olímpicos que van a suponer toda una revolución mundial para nuestro deporte, pero no es menos cierto que algo deben llevar los genes de los españoles que tan bien se adaptan al golf. Y fruto de ello son esos siete triunfos especialmente los 4 últimos que han llegado en el último tramo de la temporada y además en torneos muy importantes. Por ejemplo Álvaro Quiros ha cobrado el mayor cheque de un golfista español con su victoria en Dubai lo que demuestra que era un torneo a la altura de todo un TPC norteamericano, o Gonzalo Fernández Castaño se impuso en otro gran evento como era el Barclays por no hablar del triunfo de Sergio en Valderrama. Todos ellos tienen en sus manos, como también el incombustible Miguel Ángel Jiménez poder estar en la Ryder, ¡Ni que fuéramos Inglaterra!
Pero esta oportunidad que tiene el golf la deben de aprovechar ahora mismo o volveremos a caer en el olvido para el resto de nuestros conciudadanos que seguirán más preocupados por las andanzas de Mou o de Pep que por ese deporte de los palos y de las bolas que la gran mayoría sigue viendo como de pijos o de viejos.
Hay que ganar un Grande o conseguir una gesta como sería meter a 4 españoles en el equipo de la Ryder, porqué de lo contrario seguiremos entusiasmándonos por el fútbol y sus éxitos o por los éxitos de Nadal y compañía en el tenis, o de cualquier deportista que se proclame campeón del mundo o ganador de una medalla olímpica, aunque sea de esgrima o de badminton, deportes que seguiremos ignorando luego. El golf lleva desde 1999 sin ganar un Grande, demasiado tiempo, y mientras tanto hemos visto estallar a la mejor generación de la historia del deporte español, no nos podemos seguir quedando fuera, los nuestros no se lo merecen, son extraordinarios campeones.