Rickie Fowler consiguió ocho birdies y un eagle para darse otra oportunidad de ganar. Adam Scott jugó lo suficientemente bien como para mantener el liderato. Mientras que el novato en el PGA Tour Keegan Bradley se sumó a la acción un poco tarde.
Parecía como si todos siguieran teniendo posibilidades el viernes en el torneo Bridgestone Invitational, salvo por el jugador que la mayoría vino a ver.
En otro día de terreno blando, apto para bajas anotaciones, Tiger Woods falló un putt de 60 centímetros y no consiguió suficientes birdies para compensar sus errores en el juego corto en una tarde de 71 golpes, uno sobre par, que lo dejó en la mitad de la tabla.
Woods se quedó rezagado siete golpes, pero con 35 jugadores por delante de él.
«Hoy no estuvo muy bien», dijo Woods.
Estuvo lo suficientemente bien para Scott, salvo que no consiguió los putts que había logrado en la primera ronda de este Campeonato Mundial de Golf. Firmó una tarjeta de 70 golpes, lo que, en el campo Firestone, no es malo bajo ninguna condición.
Tras abrir con 62 golpes el jueves, Scott terminó el día ocho bajo par con 132 golpes en total, al igual que Ryan Moore (con ronda de 66), Fowler (64) y Bradley (65).
Jason Day terminó con bogey en su último hoyo para registrar 70 golpes y quedar a un golpe junto a Martin Laird (67) y Robert Karlsson (65).
«La última vez que hice 62 golpes probablemente fue hace mucho tiempo, entonces, ¿puedo esperar hacerlo dos días seguidos?», se preguntó Scott. «No lo creo. Pero es un campo difícil y si te equivocas un poco, terminas siendo castigado. No es un secreto que no es nada fácil pegar 62 golpes dos días seguidos».
Fowler tuvo un nivel bastante desparejo. Consiguió sólo cinco pares y mantuvo al público en suspenso el resto del tiempo. Logró tres birdies consecutivos y un tiro con wedge que embocó a poco más de 100 metros para un eagle en el tercer hoyo. Luego vinieron tres bogeys y tres pares.
«Muchas cosas buenas salieron hoy», dijo Fowler, que aún busca su primera victoria en el Tour. «Forjamos algo de confianza para entrar al fin de semana».
Nadie parecía divertirse más que Bradley, sobrino de Pat Bradley, parte del Salón de la Fama de la LPGA y ganador del Campeonato Byron Nelson de este año. Con muchos aficionados viendo incluso después de que Tiger Woods dejara el campo, Bradley recibió alguna ovación mientras subía en la tabla de posiciones hasta el liderato.
Mala jornada para la representación española. Todos retrocedieron en la tabla clasificatoria. Sergio García es el mejor clasificado se encuentra en el puesto treinta y nueve tras presentar una tarjeta de dos sobre par, 72 golpes. Peor le fueron las cosas a Pablo Larrazábal, que comenzó el torneo de manera esperanzadora, los 76 golpes de la segunda ronda superaron en diez la tarjeta del primer día. Cayó hasta la cuadragésimo novena posición. Miguel Ángel Jiménez repitió resultado, 73 golpes, situado en el puesto setenta y dos. Álvaro Quirós dos puestos más atrás que el malagueño firmó 74 golpes.