Los golfistas europeos volverán a desafiar a los estadounidenses con motivo del Masters, primer ‘major’ de la temporada que se disputa desde este jueves hasta el domingo en el Augusta National GC, con el objetivo de arrebatar a los americanos la prestigiosa y deseada ‘chaqueta verde’.
Los jugadores del Viejo Continente parecen haber subido su nivel en los últimos meses y han empezado a acabar con el dominio de los Estados Unidos en los ‘grandes’ y en el golf mundial, algo unido a la ‘desaparición’ de Tiger Woods como gran dominador.
Así, el californiano perdió el número uno en beneficio del alemán Martin Kaymer, que manda en el ranking por delante de otro europeo, el inglés Lee Westwood. Además, el norirlandés Graeme McDowell y el propio Kaymer se adjudicaron el US Open y el Campeonato de la PGA de 2010, dejando únicamente que Phil Mickelson, con el Masters, diese un éxito a su país en un ‘grande’, ya que el ‘British’ fue para el sudafricano Louis Oousthizen. El triunfo en la Ryder Cup apuntaló el buen momento de Europa en el mundo del golf.
Sin embargo, los europeos se enfrentan al torneo más complicado de conseguir para ellos y que no conquistan desde que el español José María Olazabal lo hiciese, por segunda vez en su carrera, en 1999. Desde entonces, la ‘chaqueta verde’ ha sido prácticamente norteamericana con tres para Woods y Mickelson, una para Zach Johnson y otra para el canadiense Mike Weir, mientras que los únicos que se han inmiscuido han sido el fidyano Vijai Singh, el sudafricano Trevor Immelman o el argentino Ángel Cabrera.
Ahora, el Augusta National Golf Club será el escenario de una nueva ‘batalla’, donde tampoco se pueden olvidar los jugadores de otras nacionalidades, como los pujantes golfistas asiáticos, entre ellos los japoneses animados por ayudar a la reconstrucción de su país, o los sudafricanos, liderados por los veteranos Ernie Els y Retief Goosen.
El favoritismo americano recae en Mickelson, que además viene de ganar este pasado domingo en Houston y siempre es un duro contendiente en Georgia, donde ha ganado en tres ocasiones.
El de San Diego es la sólida baza de los americanos dado el flojo momento de Tiger Woods, que posee cuatro chaquetas verdes, pero que sigue sin encontrar el camino de la victoria tras 17 meses y tiene complicado sumar su decimoquinto ‘grande’, aunque del californiano siempre se puede esperar una ‘resurrección’. Junto a ellos, nombres como los de Hunter Mahan, Nick Watney, Bubba Watson o el joven Rickie Fowler.
En el bando europeo, la nueva ‘hornada’ formada por los Kaymer, McDowell o McIlroy se une en las apuestas a jugadores más consagrados como los ingleses Luke Donald, Lee Westwood, este segundo en 2010, Paul Casey o Ian Poulter.
LOS ESPAÑOLES QUIEREN BRILLAR.
Junto a ellos, cuatro representantes españoles que intentarán rendir a su mejor nivel y estar entre los destacados en el fin de semana, primer objetivo para José María Olazabal, Miguel Ángel Jiménez, Álvaro Quirós y Sergio García.
El vasco, doble ganador en 1994 y 1999, retorna a Augusta tras su ausencia el año pasado con el deseo de divertirse, pasar el ‘corte’ y no acordarse de sus problemas físicos que, de momento, no le han lastrado demasiado en su inicio de campaña.
Por su parte, el malagueño está, como siempre, relajado y sin presionarse en su decimotercera participación en un campo donde su mejor resultado es el octavo de 2008, aunque en 2010 rozó el ‘top ten’.
García intentará mostrar la paulatina mejoría en su juego, aunque este ‘major’ se le suele atragantar en sus últimas comparecencias, mientras que Quirós quiere ratificar que puede ser un aspirante, para lo que necesita más consistencia en su juego para jugar en el fin de semana, algo que no ha hecho en sus dos anteriores presencias.
Todos los aspirantes afrontarán el siempre exigente recorrido del Augusta National, sobre todo el tradicional ‘Amen Corner’, espacio que comprende el ‘green’ del hoyo 11, el par 3 del hoyo 12, y la salida del hoyo 13, un espacio de una hectárea donde el viento es imprevisible, por lo que siempre se presenta decisivo a la hora de elegir a los elegidos para el triunfo.